Las declaraciones del presidente se dan justo cuando esta semana el Tribunal Superior Electoral comienza un juicio que podría inhabilitar políticamente al ultraderechista.
El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, reafirmó este lunes que su antecesor Jair Bolsonaro “coordinó” los ataques de sus simpatizantes contra las sedes de los tres poderes en Brasilia, el pasado 8 de enero.
“Ya está probado que intentaron dar un golpe de Estado coordinado por el expresidente, que ahora trata de desmentir. Cuando perdió las elecciones, se encerró en casa para preparar un golpe de Estado”, aseveró el líder brasileño en la segunda edición del programa semana ‘Conversaciones con el presidente’, retransmitida al vivo en las redes sociales.
Lula comentó que los hechos se analizarán “con mucha calma” y reiteró que “todos tendrán la oportunidad de defenderse”. “Quiero que la gente esté tranquila porque vamos a investigar y quien tenga culpa, va a pagar, va a ser juzgado por la justicia común”, añadió.
El presidente ya dijo en otras ocasiones tener “certeza” de que el ultraderechista estuvo detrás del ataque, el más grave contra la democracia desde la dictadura y que provocó graves daños en el patrimonio histórico.
“Polémica reunión”
La Policía Federal obtuvo recientemente información sobre un posible plan golpista en el celular de Mauro Cid, un militar que fue colaborador de Bolsonaro y que se encuentra detenido.
El teléfono contenía mensajes, audios y documentos sobre las supuestas maniobras para mantener al mandatario derechista en el poder, luego de haber perdido las elecciones frente a Lula.
Asimismo, las declaraciones de Lula se producen cuando el Tribunal Superior Electoral (TSE) comienza esta semana el juicio que podría terminar con la inhabilitación de Bolsonaro.
El proceso responde a una demanda interpuesta contra Bolsonaro por el Partido Democrático del Trabajo (PDT) por “abuso de poder y uso indebido de medios de comunicación” después de que, en julio de 2022, tres meses antes de los comicios presidenciales, el ultraderechista expusiera en una reunión con decenas de embajadores su infundada teoría contra la fiabilidad de las urnas electrónicas.
Si se le declara inelegible, Bolsonaro no podrá participar en unos comicios durante ocho años, un período que cuenta a partir de las elecciones de 2022, que ganó Lula.
Bolsonaro, un excapitán del Ejército muy dado a la polémica, tiene también varios procesos en el Supremo Tribunal Federal (STF), entre ellos uno por su presunta responsabilidad en los ataques del 8 de enero.
