El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ordenó el domingo un decreto de emergencia por la tormenta tropical Pilar, que según el Centro Nacional de Huracanes (CNH) descargará fuertes lluvias y provocará inundaciones en toda la costa pacífica del país centroamericano.
El Gobierno de El Salvador suspendió las clases, y con el decreto de emergencia podrá destinar fondos para hacer frente a la situación. También clasificó el nivel de alerta como “rojo”, el más alto en una escala de cuatro niveles.
Ya se han registrado algunas inundaciones en la costa central y en el este, pero el Gobierno no ha reportado daños.
El NHC en un aviso a última hora del domingo anunció que se espera que Pilar esté cerca de la costa de El Salvador el martes por la noche o el miércoles temprano, aunque dijo que “se pronostica que el núcleo del sistema permanezca mar adentro”.
Los vientos son actualmente cerca de 65 kilómetros por hora, precisó el NHC, señalando que podrían crecer con fuerza.
“Se pronostica un fortalecimiento adicional durante los próximos dos días y Pilar podría estar cerca de la fuerza de huracán para el martes”, aseguró el centro.
La ciudad mexicana de Acapulco, en la costa del Pacífico, se está recuperando del huracán Otis, que la semana pasada causó una destrucción masiva como tormenta de categoría 5, en la que murieron 48 personas.
Honduras también emitió una alerta de tormenta tropical para su costa del Pacífico, según el NHC.