El mandatario prometió firmarlo el mismo día en que esté aprobado por el Congreso.
El presidente estadounidense Joe Biden presionó este viernes al Congreso para que acepte un acuerdo bipartidista del Senado para combinar medidas de control fronterizo, en medio de la escalada de tensiones entre el estado de Texas y el Gobierno federal por el manejo de la crisis migratoria.
El mandatario dijo en un comunicado que las políticas propuestas serían “el conjunto de reformas más duras y justas para asegurar la frontera que jamás hayamos tenido en nuestro país”. Además, aseguró que haría uso de una nueva autoridad de emergencia para “cerrar la frontera” si las autoridades locales se vieran desbordadas por una afluencia de inmigrantes.
Biden instó al Congreso a proporcionar la financiación que solicitó en octubre para asegurar la frontera. Esto incluye 1.300 agentes adicionales de la patrulla fronteriza, 375 jueces de inmigración, 1.600 funcionarios de asilo y más de 100 máquinas de inspección de última generación para ayudar a detectar y detener el fentanilo en la frontera suroeste.
El acuerdo podría “estar muerto”
Los comentarios de Biden se producen mientras la Casa Blanca ha criticado repetidamente a los republicanos de la Cámara de Representantes y al expresidente Donald Trump por “entorpecer” las negociaciones en el Senado.
Por su parte, el presidente de la Cámara, Mike Johnson, envió una carta este viernes al Senado estadounidense en la que advirtió a los senadores que el acuerdo fronterizo que negocian podría “estar muerto” al llegar a la Cámara Alta.
Johnson escribió que la Ley de Protección Fronteriza, que contiene las reformas legislativas básicas necesarias para resolver el “desastre fronterizo”, fue enviada al Senado hace ya 9 meses. Entre las medidas fijadas en el documento está la continuación de la construcción de un muro fronterizo con México, el fin de la política de “captura y liberación” de los inmigrantes irregulares y reformas significativas a los actuales sistemas de asilo y libertad condicional.